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El regreso de un mapa clásico de la serie y el añadido de un nuevo rifle de asalto.

Si bien Call of Duty: Vanguard es la entrega más reciente de la franquicia, Black Ops Cold War no es olvidado del todo al estrenar este un par de nuevos contenidos.

Cuando un nuevo Call of Duty sale al mercado, la entrega anterior comienza a dejar de ser actualizada en cuanto a novedades; sin embargo, Treyarch rompe un poco este molde al ofrecer una reciente actualización para Call of Duty: Black Ops Cold War.

A partir de este 04 de marzo, el juego ambientado en la Guerra Fría presenta una nueva arma y un nuevo mapa, este último todo un clásico de la serie Black Ops.

Arrancando por el mapa, se trata del WMD, una instalación de armas abandonadas. Este escenario tuvo su primera aparición en Call of Duty: Black Ops, regresando posteriormente para Black Ops 4 en los contenidos del DLC Operation Spectre Rising.

Respecto a la arma que se suma al arsenal es la Vargo 52, un nuevo rifle de asalto.

Descrito como un arma eficaz a corta y mediana distancia gracias a su buen daño, velocidad de disparo rápida, buen manejo y velocidad de salida ata, el Vargo 52 estará bloqueado, siendo necesario cumplir con un objetivos para poder tenerlo.

  • Multijugador: Infringir 1,000 puntos de daño con rifles de asalto durante 15 diferentes partidas terminadas
  • Zombies: Eliminar a 750 enemigos utilizando cualquier rifle de asalto que haya sido mejorado tres veces en el Pack-a-Punch

Además de estar disponible en Black Ops Cold War, el nuevo rifle de asalto igualmente se encontrará para su uso en Warzone Pacific.

Fuente: Call of Duty

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