Análisis: Xbox Series S
La consola de nueva generación más pequeña, ¿vale la pena?
El pasado 9 de septiembre se anuncio al mundo la Xbox Series S, la consola de nueva generación más pequeña con un poder similar al del Xbox Series X, -la consola más poderosa de toda la generación-, pero con una capacidad de renderización más baja, aún así, ofrece un poder de procesamiento hasta 4 veces mayor que un Xbox One y admite experiencias de hasta 120 FPS, cuenta con soporte para Ray Tracing, y gracias a la arquitectura de velocidad de Xbox tiene tiempos de carga más rápidos así como la funcionalidad de Quick Resume, pero ¿qué es todo esto?
Conociendo la Xbox Series S
La pasada generación fue la primera vez que puse las manos a una consola de Microsoft gracias al apoyo de Xbox México, quienes nos proporcionaron un Xbox One S y un Xbox One X para poder reseñarlas y desde ese momento me enamoré de la retrocompatibilidad, sus servicios como Xbox Live y hoy en día el Xbox Game Pass, así como de algunos juegos exclusivos, y obviamente del soporte que Microsoft ofrece a los usuarios de Xbox en nuestro país.
Ahora con el lanzamiento de las consolas de nueva generación, la Xbox Series X y la Xbox Series S, este último lo tenemos en nuestras manos gracias a Microsoft México quienes nos proporcionaron un equipo para poder reseñar los próximos lanzamientos.
Debo admitir que para mí, la Xbox Series S era una consola que no ofrecía mucho, principalmente por su falta de capacidad para reproducir los juegos a una resolución 4K, algo que podemos ver en la Xbox One X, y aunque la resolución no sea nativa, se ve mucho la diferencia cuando juegas un título a 1080p a uno de 2160p, pero bueno, tan solo era un pensamiento de alguien que no había tenido la oportunidad de probar la consola.
Obviamente eso cambió desde el primer momento que sostuve la caja, porque si hubo algo que me encantó de esta consola fue que al abrir el empaque, el mensaje de Microsoft “Power Your Dreams” me robó una gran sonrisa; ya que es algo común que solo vengan empaquetadas en su papel y soportes, pero este pequeño detalle crea una conexión con el jugador desde el primer momento.
La consola viene con un cable HDMI de alta velocidad, el cable de alimentación, así como un control y sus inseparables pilas.
Diseño minimalista y elegante
Si hay algo que siempre me ha gustado de Xbox desde el lanzamiento de la Xbox One S, es el diseño minimalista en sus consolas y este modelo no es la excepción, luce hermosa. La Xbox Series S cuenta con rejillas de ventilación en los lados y en la parte de arriba tiene la ventilación principal (al igual que el Xbox One S) caracterizado por su diseño oscuro circular.
En la parte frontal, del lado derecho podrás ver el botón de encendido, en el lado izquierdo se encuentra un puerto USB 3.1 al igual que el botón para poder emparejar tu control. Además, esta consola no tiene ranura de discos, lo que la hace completamente digital. En la parte trasera se encuentra la entrada de alimentación, el puerto Ethernet, una ranura de expansión de memoria para las tarjetas Seagate, las cuales amplían el almacenamiento y dos puertos USB 3.1.
El control de ambas Xbox Series es el mismo y hay pocas diferencias al de su contraparte de Xbox One, comenzando con los botones A, B, X, Y que ahora se sienten más a ras del plástico, los gatillos así como los mangos están texturizados para tener un mejor agarre y la cruceta ahora es híbrida, esto permite mejorar la dirección de los movimientos en diagonal, esto ya lo pudimos ver en el control de Xbox Elite. En esta ocasión, cuenta con una entrada de carga USB tipo C en vez de una entrada micro USB, y al igual que los controles de Xbox One, cuenta con una entrada para auriculares.
También, si quieres compartir tus capturas sin necesidad de entrar al menú, podrás hacerlo sin ningún problema con el nuevo botón ‘compartir’ que al presionar una vez, tomarás una captura de pantalla y al mantenerla presionada tomarás un vídeo de los últimos 30 segundos que tiene de forma predeterminada, pero también desde las opciones podrás programar su duración así como la resolución.
El poder detrás del Xbox Series S
XBOX SERIES S | |
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CPU | CPU Z en 2 personalizado de 8 núcleos a 3,6 GHz (3,4 GHz con SMT) |
GPU | GPU de 4 TERAFLOPS, 20 CU a 1,565 GHz con RDNA 2 personalizada |
MEMORIA | Bus de 10 GB GDDR6 de 128 bits de ancho |
ANCHO DE BANDA | 8 GB a 224 GB/s, 2 GB a 56 GB/s |
ALMACENAMIENTO INTERNO | SSD NVME personalizado de 512 GB |
RENDIMIENTO DE E/S | 2,4 GB/s (sin formato) 4,8 GB/s (comprimido, con bloque de descompresión de hardware personalizado). |
ALMACENAMIENTO EXPANDIBLE | Tarjeta de expansión Seagate de 1 TBCompatibilidad con disco duro externo por USB 3.1 |
LECTOR DE DISCOS | No incluye |
OBJETIVO DE RENDIMIENTO | 1440p hasta 120 fps en algunos juegos |
SONIDO | L-PCM, hasta 7,1Dolby Digital 5.1DTS 5.1Dolby TrueHD con Dolby Atmos |
PUERTOS Y CONECTIVIDAD | 1 puerto HDMI 2.13 puertos USB 3.1 Gen 1Ethernet 802.3 10/100/1000Wi-Fi de banda dual 802.11ac Radio inalámbrica Xbox de doble banda dedicada |
DIMENSIONES | 6,5 cm x 15,1 cm x 27,5 cm |
PESO | 1.9 kg |
En relación a su hardware, la Xbox Series S y Xbox Series X cuentan con un procesador AMD Zen 2 personalizado de ocho núcleos, el CPU del Series S es de 3,6 GHz, con 10 GB de RAM GDDR6, su GPU es de 4 TERAFLOPS (20 CU a 1,565 GHz). La consola no cuenta con una unidad de disco óptico, lo que la hace completamente digital. Su unidad de almacenamiento es un SSD NVMe de 512 GB, pero el espacio real sin contar con el software de la consola nos deja una capacidad de almacenamiento de 364 GB.
Para ampliar el almacenamiento tendremos que adquirir una tarjeta de expansión de 1 TB, pero esta tiene un precio de $5,183.59 MXN en Amazon (precio actual), como opinión personal, sinceramente no tiene sentido comprar un Xbox Series S y una tarjeta de expansión, sería mejor adquirir un Xbox Series X desde el comienzo.
Pequeña pero ¿potente?
Desde el momento en que enciendes la Xbox Series S te das cuenta de la increíble velocidad de arranque gracias a la unidad SSD. La interfaz, si actualizaste a la última versión de tu Xbox One, es la misma, no hay ningún cambio ni diferencia sobresaliente que te haga sentir que tienes una consola de nueva generación, al menos no en la parte del dashboard. Bueno, ya hay opción para tener un fondo dinámico y aunque no es mi preferido, luce bastante bonito, sinceramente hubiera estado mejor una interfaz nueva, pero es cuestión de gustos.
A pesar de que la consola no tiene el poder de la Xbox Series X, si cuenta con todas sus funciones como la velocidad de carga así como una de las novedades de ambos sistemas como el Quick Resume, este nos permite pasar de un juego a otro en cuestión de segundos, ahorrándonos el tiempo de carga de cada juego, pero cabe destacar que no se puede hacer con todos los títulos, solo con algunos como: Watch Dogs: Legion, Dirt 5, The Falconeer, Forza Horizon 4, Yakuza: Like a Dragon, NBA 2K21, Gears 5, Tetris Effect: Connected, Assassin’s Creed Valhalla, Gears Tactics, y Ori and the Will of the Wisps. Posteriormente la lista crecerá.
Los juegos optimizados para la Xbox Series S que tuvimos oportunidad de analizar en esta consola fueron: Assassin’s Creed Valhalla, The Medium, Ori and the Will of the Wisps, y Crash Bandicoot 4: It’s About Time; también probamos algunos juegos que estaban optimizados para la Xbox One X como Red Dead Redemption 2 y juegos del primer Xbox como Splinter Cell Chaos Theory y Splinter Cell Blacklist en Xbox 360.
Juego | Arranque en Xbox One X | Arranque en Xbox Series S |
Assassin’s Creed Valhalla | 1 minuto 31 segundos | 50.19 segundos |
The Medium | No disponible | 31.79 segundos |
Red Dead Redemption 2 | 39.85 segundos | 27.6 segundos |
Crash Bandicoot 4 | 54.91 segundos | 30.32 segundos |
Ori and the Will of the Wisps | 1 minuto 41 segundos | 42.58 segundos |
Aviso: se actualizará la reseña con las comparativas en vídeo.
Assassin’s Creed Valhalla fue uno de los títulos que más me impresionó, originalmente tuve oportunidad de verlo en Xbox Series X y no notaba mucha diferencia gráfica entre esa versión a la del Xbox One X, pero las actualizaciones posteriores optimizaron mejor el juego y tanto las texturas como los frames por segundo mejoraron notablemente. El juego corre a una resolución de 1440p a 60 FPS y en las misiones que jugué, no presencié el molesto screen tearing.
Crash Bandicoot 4 It’s About Time es uno de los juegos que más disfruté, en especial porque en el Xbox One X sus tiempos de carga son algo elevados y en el Series S el tiempo de carga de cada nivel es de tan solo 9.1 segundos, mientras que en Xbox One X es de 26.78 segundos.swei En el aspecto gráfico no hay gran diferencia, solo es notable en ciertas texturas pero en general podría decir que son las mismas en el Xbox One X.
Otro de los títulos que probamos fue el de Red Dead Redemption 2, juego que luce espectacular en el Xbox One X, lamentablemente, a excepción de los tiempos de carga, gráficamente el título luce igual a la versión de Xbox One S, las texturas lucen borrosas y el dibujado de lejos no se distingue bien. Así como este juego que fue mejorado para el Xbox One X, hay otros que tampoco lucen bien y parece que se está corriendo la versión del Xbox convencional a una resolución de 900p.
Esto ya se sabía desde antes del lanzamiento de la consola, los únicos juegos optimizados para la Xbox One X que si se pueden correr con mejoras en sus texturas, son los títulos de Xbox y Xbox 360, tuvimos oportunidad de probar Splinter Cell Chaos Theory en Xbox y Splinter Cell Blacklist en Xbox 360 y ambos juegos corren a una resolución de 1440p.
Como jugadores, nos solemos fijar en el ruido que la ventilación pueda hacer, con la primera Xbox One, la consola se calentaba muchísimo y en ocasiones solía hacer demasiado ruido, lo que llegaba a ser un poco molesto. Pero con el Xbox One S y Xbox One X, ninguno se calienta demasiado, incluso en los juegos más exigentes, ¿pasa lo mismo con el Series S? La respuesta es sí, el sistema de ventilación es muy silencioso, casi imperceptible, mientras que la temperatura de la consola con un juego exigente como Assassin’s Creed Valhalla o Red Dead Redemption 2, la temperatura en la parte superior circular oscura suele subir de los 50,2 ºC a los 60,1 ºC.
Tú tienes la última palabra
Sí, el Xbox Series S tiene todo lo que esta generación nos puede ofrecer a excepción de la resolución en 4K, pero es una consola que solo podríamos recomendarla a un tipo de público específico; el casual, porque el jugador más exigente que haya tenido oportunidad de tener el Xbox One X -como un servidor-, verá un enorme retroceso visual con los juegos de la pasada generación que no estén optimizados para la Series S, si bien lo visual no es lo importante, es muy notoria la baja calidad gráfica.
La velocidad en los tiempos de carga son importantes pero yo preferiría esperar un minuto de carga y que el juego me muestre su máximo esplendor gráfico a esperar 15 segundos y que el juego muestre gráficos borrosos, aclaro que esto solo pasa con los títulos de la pasada generación, pero los juegos optimizados para Xbox Series podrás disfrutarlos en una resolución a 2K, pero esto dependerá mucho del estudio desarrollador.
Uno de los problemas más notables de esta consola es el almacenamiento, el cual solo es de 364 GB, deberás considerar qué juegos instalar ya que hay algunos que pasan de los 100 GB, dejándote con muy poco espacio, podrías adquirir una tarjeta de expansión pero su precio es tan alto que sería mejor invertir de inicio esos más de 5000 pesos mexicanos en comprar un Series X.
Sinceramente, ahora que ya tuve oportunidad de probar esta consola, puedo decir que para los jugadores exigentes no va a tener mucho sentido, pero si eres un padre o madre de familia que quiere convivir con su hijo(a) algunos de los 100 títulos que ofrece Xbox Game Pass o el jugador que suele jugar pocas horas a la semana, o si no tienes un televisor 4K y vienes del primer modelo del Xbox One o Xbox One S, será una gran opción para ti.
Por último, uno de sus puntos fuertes es el precio, el cual es de $ 7,799.00 MXN en Amazon y hay otras tiendas especializadas que lo han ofrecido en oferta hasta en los $6,599,00 MXN. Como puedes ver son muchos los puntos que se deben de tomar en cuenta, es por eso que por ahora, en Gamer Style le damos el Silver Award, esperando un poco a ver cómo avanza esta generación, y si en el futuro no habrá problemas con los juegos por su bajo poder.