Reseña: Call of Duty Black Ops Cold War
Nuevo año y un nuevo Call of Duty… ahora en la Guerra Fría.
En medio de un momento muy complicado a nivel mundial por la presencia del COVID-19, que desde finales del año pasado no ha dado tregua alguna, llega sin falta a su cita anual una nueva entrega de la serie Call of Duty que retoma la subsaga Black Ops; una de las más queridas por la comunidad.
Siendo un desarrollo en conjunto entre Treyarch y Raven Software, Call of Duty Black Ops Cold War es lo nuevo de esta ya infaltable IP de disparos en primera persona, juego que se estrenó tanto en las consolas de pasada y nueva generación junto a PC el pasado 13 de noviembre tomando el testigo de Call of Duty: Modern Warfare del 2019.
Después de algunos días de juego, estas son las impresiones sobre lo que ofrece esta nueva entrega de Call of Duty.
UN DESARROLLO CAÓTICO
Como viene siendo desde hace algunos años, los desarrollos de Call of Duty se distribuyen entre tres estudios que entran en rotación con ciclos de tres años siendo estos Treyarch, Infinity Ward y Sledgehammer Games. Para la edición de este año era originalmente Sledgehammer quien le daría forma a lo nuevo de la serie tras lo hecho en Call of Duty WWII; sin embargo, Activision tomó la decisión se hacer ajustes de último momento terminando por designar a Treyarch como los responsables del Call of Duty 2020 quienes apenas hace dos años lanzaban Call of Duty: Black Ops 4 junto a los DLC que llegaron posteriormente.
Si bien en su momento desde Treyarch aseguraron estar listos para el reto de un desarrollo con un tiempo más corto a lo normal, lo cierto es que mientras más me sumergía dentro de Black Ops Cold War y las horas avanzaban no podía evitar observar que es un juego al que le faltó un mayor tiempo de trabajo para desarrollar más algunas buenas ideas presentes, al tiempo de dejar nuevamente en evidencia que la saga necesita tomarse ya un pequeño descanso pues su desgaste está ya en su límite con pocas novedades en líneas como el multijugador.
UN GRIS REGRESO A LAS RAÍCES
Para Cold War se apostó por retomar las bases de lo que en su momento fue Black Ops 1 con una secuela directa de este mítico juego trasladando todo el conflicto a los años 80’s (con flashbacks más atrás) para encontrar en la Guerra Fría el punto central en el que tenga lugar la trama que, como se puede esperar, cuenta con intrigas, traiciones y conspiraciones.
A pesar de que este periodo, y todo lo que envolvió al conflicto entre los bandos de los Estados Unidos y la Unión Soviética, en el papel suena sumamente atractivo; la ejecución desafortunadamente no termina siendo la mejor con un modo campaña poco memorable sintiéndose como un paso hacia atrás de lo que se vio en Modern Warfare.
Durante la historia tomaremos el papel principal de un soldado bajo el nombre código ‘Bell’, el cual deberá frenar a un espía soviético conocido como “Perseus” que busca desatar el caos en el mundo a través de la detonación de bombas nucleares. Si, nuevamente la clásica historia que ya se ha visto en anteriores Call of Duty con los norteamericanos saliendo a salvar el día al estilo de una cinta hollywoodense.
A lo largo de las 6 a 8 horas que toma terminar la campaña esta no logra terminar por atrapar. Existen grandes momentos de acción con explosiones y tensión, pero narrativamente queda a deber con personajes muy poco desarrollados con algunos como Alex Mason y Frank Woods terriblemente desperdiciados, dando el sentimiento de que fueron incluidos solo para pegar en la nostalgia de los jugadores que crecimos con Black Ops 1 como un mero “cameo” y no porque existiera una justificación válida para su presencia aquí.
Como lo mencioné anteriormente, durante el transcurso de la campaña encontré ideas interesantes que pudieron ser explotadas aún más como la posibilidad de personalizar al personaje principal dándole un nombre, perfil psicológico y hasta un estilo de combate, opciones que al final no llegan a tener un gran peso y que, en caso de haber sido bien realizadas, habrían dado un sentimiento más personal a la experiencia de cada jugador. Asimismo, Cold War cuenta con toma de decisiones y posibilidad de elegir qué es lo que contestará el personaje en determinados momentos, sintiéndose esto también sumamente desperdiciado al hacer falta de una voz para nuestro personaje llegando a dar un sentimiento vacío en cada conversación.
Junto al clásico “túnel” en el que se desarrollan las campañas de Call of Duty con una misión tras otra con cinemáticas en medio, en Cold War buscaron ofrecer un poco más allá de eso con algunos puzzles y misiones secundarias dentro de la base de operaciones para conocer más sobre la historia, elementos atractivos, aunque son escasos dejando con ganas de más.
Un punto a destacar es el trabajo realizado para hacerte sentir durante toda la campaña que estás en verdad en los 80’s con la música, vestimentas y decorados muy bien elegidos para dar mucha vida al mundo.
En general la campaña me dejó un tanto decepcionado y sin ganas de volver a jugarla tomando en cuenta lo que ofreció Modern Warfare, que por su lado disfruté hasta dos veces más.
UN MULTIJUGADOR MUY CORTITO
Pasando al apartado multijugador, que será la modalidad en donde mayor horas pasaremos, aquí Treyarch va a lo seguro; sin embargo, al igual que con la campaña pareciera que el poco tiempo de desarrollo dio como resultado que los contenidos sean escasos dando la impresión de estar jugando un juego a medias.
Para iniciar tenemos únicamente 10 mapas (con Nuketown 84′ llegando este 24 de noviembre), una de las cifras más bajas en la franquicia, haciendo que tras unas cuantas partidas el estar en los mismos escenarios una y otra vez sin tanta variedad terminé siendo aburrido muy rápidamente. La estructura de estos mantiene lo ya muy bien conocido en los pasados Black Ops con mapas de tres líneas con pasillos y zonas elevadas, aunque con tamaños que no terminan por convencerme al ser estos un poco más grandes de lo que deberían como son los casos de Miami.
A nivel armas nuevamente Call of Duty nuestra su músculo con mucho de donde elegir con una gran cantidad de accesorios, mientras que los perks ahora cuentan con un llamado comodín que ofrece cierto tipo de ventaja como poder llevar más accesorios en cada arma.
En cuanto a los modos de juego tenemos, como es ya recurrente, los clásicos baja confirmada, dominio o buscar y destruir a los que se le añaden tres nuevos modos bajo los nombres Escolta VIP, Armas Combinadas y Equipos de Asalto: Bomba Sucia siendo este último en el que mejor la he pasado enfrentando a 10 equipos de 4 jugadores para obtener la mayor cantidad de uranio y crear bombas sucias, ganando el equipo que más uranio logre juntar todo en dos mapas creados especialmente para esta modalidad con grandes dimensiones.
Sobre la jugabilidad encontré varios cambios positivos que en su momento no me gustaron de la alfa y la beta, aunque el correr o apuntar se sigue sintiendo un poco lento como si los personajes estuvieran cargando kilos y kilos de equipo llegando a ser un poco frustrante acciones básicas como escalar, agacharse o simplemente apuntar.
Importante señalar que el juego cruzado vuelve a estar presente en la franquicia, con el plus de poder jugar entre ambas generaciones de consolas y PC sin ninguna clase de restricción uniendo a todos bajo un solo manto.
Así, Cold War presenta un multijugador “bueno” en términos generales sin tantos riesgos con una fórmula ya muy conocida por los fanáticos, pero al que indudablemente le hace falta más mapas o modos de juego para sentirse más completo.
LOS ZOMBIES ESTÁN DE VUELTA
Después de estar ausentes en Modern Warfare ante la postura de Infinity Ward de ofrecer un juego “más realista”, Treyarch trae de regreso su ya tradicional modalidad de zombies.
Die Maschine es el nombre del único mapa disponible en el lanzamiento de Black Ops Cold War, siento esta una reimaginación de Nacht Der Untoten de Call of Duty World at War con una primicia de nazis realizando experimentos con elementos como viajes entre dimensiones y el tan característico éter oscuro, sello de Black Ops Zombies.
Pese a mi enorme expectativa al ver los primeros teasers que mostraban un enfoque más oscuro con aquellos planos mostrando solo una pequeña linterna como única luz, ya sobre el juego mi decepción fue muy importante viendo que ese estilo tipo ‘survival horror’ se limita a un muy pequeño tiempo y tras ello tenemos lo que todos ya conocemos de este modo.
Algo que llamó mi atención es que en esta ocasión todo se sintió mucho más “sencillo” con un easter egg muy amigable de descubrir con inclusive algunos señalizadores visuales de cosas por hacer como activar la energía o que pieza se debe tener para activar el Pack-A-Punch. Este “cambio” hizo que terminara la misión en menos de 20 oleadas en apenas mi cuarta partida.
Algunos otros cambios a resaltar en relación al pasado es la posibilidad de evacuar la zona tras la oleada 10 para mantener todo el progreso siendo para ello necesario solamente solicitar helicópteros de extracción y eliminar todos los zombies de la zona de aterrizaje.
Acompañando al clásico zombies por oleadas se incluye el modo Arremetida cuyo objetivo es sobrevivir lo máximo posible mientras se recolecta éter oscuro apareciendo desde los zombies más básicos hasta los mini jefes radioactivos. Asimismo, Dead Ops Arcade vuelve con una tercera parte en vista cenital y donde la misión será derrotar al clan del gorila en una modalidad peculiar y muy divertida.
Como ya se pudo ver en Modern Warfare, todas las armas comparten progreso en los modos de juego, por lo que todo el nivel que consigas en zombies estará en el multijugador y viceversa, siendo de esta manera una unificación a destacar que hará que subas el nivel de las armas constantemente sin importar el modo que estés jugando.
¿Y WARZONE?
Con Blackout, Call of Duty tuvo un primer acercamiento al género de los Battle Royale haciéndolo con relativo éxito. Sin embargo, fue con Warzone que llegaron muy alto con miles y miles de jugadores sumándose sin parar día tras día.
Ante el éxito y con la idea de mantener Warzone por mucho tiempo más, se anunció que este se acoplará a Cold War, un movimiento que al cierre de esta reseña aún no está disponible.
A pesar de que al iniciar Cold War aparece en el menú la pestaña de Warzone, este no se encuentra integrado lo que es un problema para los discos duros ya que entre ambos juegos la instalación pasa los 200 GB en una situación que cambiará en diciembre cuando Warzone ya forme parte formalmente de Cold War recibiendo las armas de este y el estilo dejando atrás Modern Warfare.
GRÁFICOS Y AUDIO EN EVOLUCIÓN
En lo relativo a los gráficos y el audio, Call of Duty Black Ops Cold War retoma el motor gráfico estrenado en Modern Warfare puliendo detalles como texturas y efectos de iluminación con sonidos muy bien logrados en especial con las armas que una vez más destacan enormemente cada una con un sonido particular al dispararse.
Es en la nueva generación de consolas donde Cold War muestra todo su potencial gracias a aspectos como el Ray Tracing, aunque sin una diferencia abismal de lo que se puede encontrar en las versiones PlayStation 4 Pro o Xbox One X ya que no fue un desarrollo pensado exclusivamente en aprovechar al máximo lo que PlayStation 5 y Xbox Series X son capaces de ofrecer.
CONCLUSIÓN
En conclusión Call of Duty Black Ops Cold War es un juego que se queda un tanto corto en muchos rubros con una campaña gris que se encuentra por debajo de los pasados Black Ops y un multijugador y zombies faltos en contenido y sin tantas novedades.
Se rescatan interesantes ideas como las opciones de diálogo en la campaña, la personalización del personaje principal o los nuevos modos en multijugador, pero sin que estos sean un gran diferenciador para lo que Call of Duty ha venido mostrando en los últimos años.
https://www.youtube.com/watch?v=ZOxWQGkho4E
Aún por delante Cold War tiene un largo camino por recorrer con nuevos contenidos que llegarán por medio de las temporadas con la primera iniciando en diciembre, recordando que todo el contenido ‘jugable’ como mapas, armas, y modos serán gratuitos ya sin pases de temporada de por medio limitando se a un pase de temporada con elementos meramente estéticos.
Título: Call of Duty Black Ops Cold War
Desarrolla: Treyarch y Raven Software
Publica: Activision
Género: Disparos en primera persona
Plataforma: PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X/S y PC
Estreno: 13 de noviembre del 2020