Crítica: Sonic la película, una sorpresiva adaptación

¡Tienes que ir rápido a verla!

He sido fan de Sonic desde los 9 años. Sus juegos siempre significaron grandes momentos de velocidad junto a pegadizas melodías en coloridos niveles. Lo amo. Era inevitable sentir una enorme inseguridad cuando me enteré que habría una adaptación hollywoodense… ¡Y mucho más después de haber visto el diseño original!

Haya sido un movimiento de marketing o no, Paramount escuchó a su audiencia y rediseñó por completo al personaje para ahora sí, animarnos a vivir sus aventuras. Con las actuaciones de James Marsen, Jim Carrey, Tika Sumpter y en inglés, Ben Schwartz como el estelar erizo, la película es una sorpresa en las adaptaciones de videojuegos donde se respeta la fuente original, sin dejar a un lado una nueva propuesta.

Sonic acaba refugiado en el pueblo de Green Hills, Montana, mientras intenta ocultarse de aquellos villanos que buscaron raptarlo por sus poderes. Una noche, accidentalmente provoca un apagón que llama la atención del gobierno, mismos que llaman al orate Dr. Robotnik para investigar la situación. Por vueltas del destino, nuestro héroe es rescatado por Tom, el sheriff de Green Hills que deberá ayudarlo a llegar a San Francisco donde por accidente, terminaron los anillos que ayudan a Sonic a escapar a otro planeta. ¿Lograrán salvarse de las garras del malvado doctor?

No tenía expectativa alguna de Sonic. Carajo, cada adaptación de videojuego siempre resulta fatal (con la sana excepción de Detective Pikachu). No solo eso, el trato que Sega le ha dado a la mascota durante años con lanzamientos regulares o mediocres, era motivo suficiente para desconfiar. Pero sorpresivamente, el resultado final es un filme familiar decente, con buenas risas en parte gracias al enorme talento de Carrey como el antagonista. Sus diálogos tienen buen timing, la actuación es un recordatorio joyita de su época dorada en los 90s y la caracterización, es refrescante.

Otro de sus puntos fuertes son las secuencias de acción, constantes y emocionantes, donde incluso saben encadenar bien los momentos de humor con la persecución sin fin. Ayuda que el personaje de Marsden, un especialista en protagonizar junto a animales antropomórficos, sea un hábil policía con grato carisma.

Parte de la esencia de Sonic es su actitud desenfadada bien noventera. Esto lo vemos al conocer su espacio: hace air guitar, lee comics, juega béisbol; es un Brandon de Beverly Hills 90210, tal cual fue concebido el erizo. Sin embargo, esto conlleva el mayor defecto de la película: su humor estúpidamente pueril. Algo que caracterizaba al personaje antes de que siquiera pronunciara una palabra, era la ironía que emanaba. Aquí mantiene un porcentaje de aquella personalidad pero gana la carga melodramática que busca a la fuerza encajar en la necedad de los creadores de consolidar el mensaje familiar. Y resulta gris cuando Sonic, se entristece cual caricatura Disney por no tener un amigo.

También en contra es lo predecible de su trama. Una road movie de pareja dispareja en busca de resolver un problema mientras el malo muy malo va detrás de ellos. No hay sorpresa alguna más que el fan service al final. Es tan genérica en ese aspecto, que hasta tiene una pelea en un bar sureño de motociclistas. Es una secuencia que de inmediato remite a aquel glorioso momento de Quicksilver en Days of Future Past pero sin tanta maestría y enfocada al slapstick.

Sonic la película es una sorpresa divertida, un satisfactorio recorrido hacia lugares demasiado comunes para su propio bien. Gran parte del atractivo es la joya actuación del Dr. Robotnik, quien inteligentemente le da su propia interpretación antes de caer en el juego del disfraz (aunque no se preocupen, hay varios giros al respecto que harán sonreír a los fans). La mayoría de los diálogos son graciosos, la música es buena, hay retazos de humor absurdo que funcionan de maravilla, la animación es agradable y la producción impecable. Inesperado.

Y sé que muchos se preguntarán acerca del doblaje del youtuber Luisito Comunica… Cumple, hasta ahí. No es sobresaliente, pero no lo hace mal. Limiten su odio contra el star talent a la semana pasada cuando aún no sabíamos el resultado.

Calificación: 7.0