Un juego como este no necesita un pedazo de metal cuando tiene el amor y reconocimiento de miles de personas.
Debo admitir que yo no conocía Red Dead Redemption pero este año tuve oportunidad de jugarlo y conocer la gran historia de John Marston. Después de ver todos los traílers de la secuela, para mí Arthur Morgan no era un personaje carismático y que en su momento no me transmitió nada… que equivocado estaba.
Recientemente en The Game Awards se premió a God of War como Juego del Año y admito que me dolió porque a pesar de ser un reconocimiento demasiado comercial, no deja de ser un reconocimiento. Pero vaya sorpresa me llevé al ver que algunas compañías anunciaban su logro en redes sociales, y aunque Rockstar Games ganó algunos importantes, ninguno lo celebró.
Eso fue algo que llamó mi atención y cuando a los pocos días terminé el juego, fue ahí cuando comprendí que una obra maestra de esta magnitud no necesita de un pedazo de metal o cristal cuando se tiene el corazón de miles de personas y es probable que Rockstar Games lo vea de esa forma.
También me sorprendió ver que muchas personas le tienen odio a Rockstar Games, celebraban que no haya ganado el premio a lo mejor del año, ¿por qué? No lo sé, pero es una pena que se priven de jugar un título que te transmite demasiadas emociones; eso sí, Red Dead Redemption 2 no es para todos y no lo digo porque el juego puede llegar a ser un poco lento o porque se esmera a ser un simulador del viejo oeste, lo digo porque si no hay nobleza en tu corazón, no vas a poder ver el increíble mensaje que Rockstar Games quiso transmitir a través de Arthur Morgan, “lealtad”.
El vinculo con Arthur Morgan y el mundo de RDR2
Arthur Morgan y la banda de Dutch Van Der Linde huyen después de un atraco a un ferry en Blackwater y tras perder a varios integrantes de la banda nos damos cuenta que desde el comienzo Rockstar quiso transmitir el mensaje de lealtad, misma que le tiene a la banda por encima de su propio bienestar.
En el momento que tocas el control con Arthur te das cuenta que la banda es primordial para él, no por nada existe la opción para que les lleves alimento, realices tareas para ellos y mejores el campamento para que estén en mejores condiciones y no les haga falta nada.
Es por esta razón que el juego no es para todas las personas, porque éstas opciones podrían ser aburridas para aquellos que solo vengan al juego por la acción o por descubrir “el mame”, mismo que jamás van a encontrar si vienen con ese pensamiento tan superficial. Rockstar Games al implementar este tipo de mecánicas tiene un objetivo, que crees un vinculo con la banda y con el protagonista, que no solo controles a un personaje, ¡que lo vivas!
Con este tipo de acciones hace que te encariñes de Arthur y cuando pasas tiempo en el campamento vas conociendo a todos tus compañeros; que al final termina siendo tu familia, sus deseos, sus pasiones, sus miedos, además los conoces con una increíble naturalidad, una que jamás se ha visto en otro juego de vídeo.
El vínculo con Arthur Morgan y la banda es fuerte cuando profundizas en el juego
Y es que a lo largo de tu aventura vives algunos sucesos importantes que llevan a Arthur a cambiar su forma de ser y de vivir la vida; no solo la suya, también la de las personas que lo rodean y cuando profundizas en cada uno de ellos si algo les pasa lo tomas a nivel personal, porque a lo largo de la trama te has esmerado por cuidar de tu familia.
Tal vez ese es uno de los mensajes más fuertes de este juego, ese y redención, pero en este último me gustaría más que lo experimentes por cuenta propia y te des cuenta de que todas tus acciones tienen consecuencias, pero que al final tienes la oportunidad de elegir en que tipo de persona quieres convertirte.
Es por eso que Rockstar Games se esmeró tanto en ofrecernos un mundo lleno de vida con una naturalidad que da miedo, para que tu aventura la vivas como si en verdad estuvieras en las botas de Arthur Morgan. De nada hubiera servido crear una historia donde sintieras empatía por los personajes cuando el mundo que te rodea no se siente igual de vivo como en la vida real.
Red Dead Redemption 2 es un conjunto de emociones, de historias, de valores y una gran banda sonora que solo se descubren si inviertes un poco de tu tiempo y si la nobleza en tu corazón te permite ver más allá de los polígonos que ves a través de la pantalla, de verdad, si entras al mundo que Rockstar Games se esforzó en diseñar con tanto realismo, con una actitud negativa y solo para intentar descubrir “el mame”, no pierdas el tiempo, este juego no es para ti.
Hasta la vida misma es así, como cuando conoces a una persona, la ves y te puede gustar, pero con el tiempo te puedes llegar a enamorar porque ves más allá de lo superficial y te enfocas en lo que verdaderamente importa, así es Red Dead Redemption 2, un hermoso juego que te enseñará a valorar la vida a través de la historia de Arthur Morgan y la banda de Van Der Linde pero solo si te esmeras a darle una oportunidad y abrir tu corazón a esta gran historia.
God of War es un juego increíble que transmite el valor de ser padre pero en Red Dead Redemption 2 te enseñan el valor de la lealtad. God of War tendrá una gran historia pero Red Dead Redemption 2 posee más de 10 historias de personas que tienen sueños y miedos, y una de ellas te enseña el valor de la vida. God of War tendrá grandes enemigos pero en Red Dead Redemption 2 hay uno que como todo buen enemigo aprendes a odiarlo a muerte. God of War posee grandes gráficos y escenarios épicos, pero en Red Dead Redemption 2 tiene eso y algo más importante, ¡vida! Vida misma que ves reflejada en la flora y fauna, en la vida de su gente que va más allá de ser simples NPCs. God of War tendrá música bellísima, pero en Red Dead Redemption 2 cuando lo combinas con la historia y el amor por los personajes, pueden hacer llorar hasta el corazón más duro.
Sí, God of War merecía ser el juego del año porque hubiera sido un premio que se queda corto a la inefable experiencia que te ofrece Red Dead Redemption 2. Por favor, no pierdas el tiempo criticando mi opinión, mejor intenta jugar este título y descubre por ti mismo si tengo razón o no. Al final lo importante no son los premios, son las increíbles experiencias que los juegos nos brindan.